La exposición presenta una primera exploración sobre instrumentos de materialidades que van desde la cerámica, fibras, cañas y maderas, hasta el trabajo con plástico, que contienen tecnologías capaces de producir sonido. Las vibraciones del aire, membranas, cuerdas y sus propios cuerpos, forman parte de una trama de relaciones sociales que logra trascender a lo que hemos conocido como música.
En el territorio latinoamericano, melodías, texturas y resonancias se trasladan y encuentran, atravesando los espacios fronterizos virtuales y estableciendo redes de conocimiento y comunidad. Nos enfrentamos a objetos creados para la activación de experiencias rituales, celebraciones religiosas, ceremonias medicinales y comunicación con la naturaleza; junto a sus transformaciones insertas en el cotidiano musical, lúdico y festivo.
Como un espacio para conocer las travesías sonoras del continente, la herencia devocional, indígena, afrodescendiente y mestiza, la exposición nos sumerge en los resultados de la interacción cuerpo-objeto-tecnología, mientras que pone en valor los extraordinarios saberes que emergen de idiófonos, cordófonos, membranófonos y aerófonos.