Kullkull (Trompeta)

Contexto histórico

El kullkull es una trompeta mapuche manufacturada en un cuerno de vacuno. Su nombre posee un posible origen en el kunkull, con la misma forma pero hecho de hojas envueltas y amarradas. Se conjetura que el uso del cuerno, es una adaptación posterior al contacto hispánico (Pérez de Arce 2007, Merino, 1974). Sus usos se asocian al llamado en la distancia, tanto en la vida cotidiana como en las llamadas de guerra, alarma. También se usa en instancias ceremoniales específicas, como el könkunu, periodo de entrada al ritual del nguillantun (Ñanculef, 2016). Además sus sonidos son parte de algunas ocasiones sociales festivas o deportivas, como dar ánimos en el juego del palín o juego de chueca (González, 1986). Javier Rapiman (2024) destaca que este kullkull tiene importantes huellas de uso, se nota que estuvo colgado cerca del fogón de una ruka  porque está ahumado. Además relata que cuando estas piezas se tocan para hacer anuncios abren un portal  donde se genera un diálogo con los ancestros.

El kullkull forma parte de la colección de objetos mapuche recolectada por Pedro Doyharçabal, hacia fines del siglo XIX y las primeras tres décadas del XX. Para entonces, estaba en curso el proceso de Radicación de Indígenas (1883-1929) que siguió a la ocupación del territorio por parte del Estado chileno y que implicó una sustancial reducción de las tierras en manos del pueblo mapuche. Entre las consecuencias de la radicación se cuenta el empobrecimiento de la sociedad indígena, lo que forzó a muchas personas a vender y/o empeñar objetos como joyas, mantas e instrumentos, que acabaron en manos de coleccionistas como Doyharçabal. La colección fue comprada por la Universidad de Chile en 1946.