Chischil (Sonajero)
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Ver fichaTRAVESÍAS SONORAS DE LATINOAMÉRICA IDIÓFONOS: IMÁGENES VIBRANTES
Nº de inventario: 3148
Clasificación Sachs y Hornbostel: Idiófono
Nombre común: Sonajero
Nombre específico: Sonajero
Fecha de creación: Mediados del siglo XX
País: Perú
Materialidad: Calabaza, pigmentos
Técnica: Secado, talla y policromía
Alto: 12.9cm
Diámetro: 6.1cm
Peso: 29.37g
Artefacto sonoro de cuerpo globular con un apéndice alargado a modo de mango en uno de sus extremos, realizado en una sola pieza de calabaza. Presenta decoración antropomorfa y fitomorfa tallada en la zona superior del cuerpo globular. La pieza se encuentra policromada en tonos rojos, verde, amarillo y naranja.
Grebe, María Ester. «Instrumentos musicales precolombinos de Chile». Revista Musical Chilena 28, 128 (1978): 5-55.
Manga Chávez, Dimitri y López Alcas, Ricardo [Pacha Wakay Munan] (05 de marzo de 2022) Instrumentos Prehispánicos: Sonajeros [Video]. Proyecto beneficiario de las líneas de apoyo económico para el sector cultura. Ministerio de Cultura del Perú. [Revisado en línea 06/01/2025] Youtube. https://www.youtube.com/watch?v=oTB6ODwVRzM
Este tipo de idiófonos presenta una gran dispersión regional y profundidad temporal en el continente americano. A modo de ejemplo, se puede señalar que, en su clasificación de los idiófonos precolombinos de Chile, María Ester Grebe (1978) refiere a las sonajas globulares hechas de calabaza, madera, cuero y arcilla. Se trata de objetos que presentan variabilidad en forma y tamaño «que depende tanto de la forma natural de la calabaza y de las posibilidades de sus materiales sustitutivos como de factores culturales, locales y regionales» (p. 16) y que presentaban una amplia dispersión en la zona norte del actual territorio chileno.
Los sonajeros de calabaza pertenecen a la familia de las lagenarias (lagenaria siceraria), también conocida como mate y puede que fuera el material más usado como sonaja en América. Las maracas de este material son un instrumento emblemático de este continente y de sus culturas hasta la actualidad. Su fruto es una cápsula o recipiente que contiene en su interior sus propias semillas, que al secarse produce un sonido por sacudimiento [al ser agitado/accionado]. Se puede utilizar como instrumento sin hacerle ninguna modificación, produciendo así sonidos secos y suaves. Dentro de esta familia existen otros modelos que utilizan el cuerpo globular insertando un mango o agarradera. Otra forma de usar la parte globular de la calabaza, es insertar dentro de este globo, material externo que cumpla la función de retener u obstruir el movimiento de las partículas, sean semillas u otro material, para multiplicar y retardar el entrechoque interno, produciéndose múltiples sonidos casi simultáneos.
Sus características físicas se amalgaman con las características plásticas o simbólicas de los sonajeros y maracas como sucede en otras familias de instrumentos, representándose escultoricamente figuras antropomorfas, zoomorfas geométricas y otras como en el caso de los sonajeros de la colección del MAPA. Es muy posible que originalmente los sonajeros de calabaza fueran usados en ritos mágicos religiosos, curanderismo o ritos de fertilidad.